Algunas polillas de África y Asia suelen beber lágrimas de cocodrilos, caballos, antílopes y ciervos, entre otros. La especie Mabra elephantophila se atreve con animales aún más grandes, los elefantes, aunque lo cierto es que parece que los paquidermos ni se inmutan mientras el insecto se cuelga de sus pestañas para "echar un trago". En Madagascar, donde no viven animales tan descomunales, hay especies de polillas que consumen lágrimas de aves. Mientras las aves duermen, las polillas introducen su probóscide bajo los párpados y beben con rapidez.
Opinión personal: Debido al bajo sodio que se encuentra en el suelo de Madagascar, a las polillas les hace falta sal, por lo que ellas han buscado una nueva forma de adquirirla, sustrayendo las lágrimas de animales, que como sabemos contienen sal, posiblemente la necesaria para ellas. Aunque también esas lágrimas pueden serviles como bebida refrescante. Es posible que esta conducta sea tomada también por polillas de otra especie y se consiga así una característica principal de estos insectos.
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